domingo, 20 de diciembre de 2015

Absurdas palabras

Pasadas las horas más complejas, los sueños se diluyen en tapices adornados con acuarelas de mil colores. Guirnaldas de lágrimas cobrizas se adormecen como pájaros libres, nómadas desequilibrados en busca de su hogar más cercano, locos, pues los nómadas no tienen hogar. Todavía siento, todavía tengo miedo, todavía me recome la duda. Deposito mi esperanza en la locura de los sueños, pues es el único rincón donde puedo abrazarla.